
A fines de 2018 los consumidores eléctricos cubrieron el 52% de los costos de generación, mientras que el Estado nacional se hizo cargo del resto. Los subsidios energéticos treparon de $ 123.610 millones a $ 184.314 millones. El Gobierno, igual celebra. Ya se prevén más aumentos. Aunque el Gobierno nacional ajustó fuertemente las tarifas de luz y gas, al cierre de 2018 se incrementaron 49% los subsidios a la energía y los usuarios llegaron a cubrir a penas la mitad de los costos de generación, lo que implica que habrá nuevos aumentos en los próximos meses.
En 2018 ambos servicios sufrieron ajustes del 67% para el gas y por encima del 50% en el caso de la luz. En el mismo período, los subsidios energéticos crecieron 49%, al pasar de $ 123.610 millones a $ 184.314, según datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso. En términos reales, descontada la devaluación, el incremento real de los subsidios energéticos fue del 11%.
La ampliación de los aportes estatales está explicada fundamentalmente por el crecimiento de los subsidios al gas, que subieron 66,7%, y a la electricidad, que treparon 38,6% en un solo año. Si se tiene en cuenta que la ejecución anual presupuestaria de los subsidios energéticos fue del 97,1%, el gasto del Estado en este rubro debió ser mayor.